El otro día mis padres me llevaron por ahí a comer, para que me diera un poco el aire y la luz, ya que últimamente no salgo mucho de mi cuarto. Tras la comilona, se fueron a hacer la compra a un supermercado cercano, momento que aproveché para ir a unos Chinos que había al lado. Y digo "Chinos" (por favor, que nadie se ofenda) porque desde que llegó el euro a nuestras vidas, en mi barrio se llaman así. Antes eran tiendas "Todo a 100" o "Tiendas de veinte duros". Ahora el descontrol es total (60cent, 75cent, 1€), pero estos comercios no han perdido su esencia. De hecho cada vez hay más y son más grandes, lo cual, para mí, es una gran noticia. Nunca deben menospreciarse los "tesoros" que pueden encontrarse en estos sitios, lo que me da pie a una nueva entrada de "Astucias". ¿Cuál es ese artículo que jamás te has parado a mirar y que te vendría muy bien? La respuesta es: pastilleros.
Los pastilleros, y siguiendo con mi post anterior, son unas estupendas cajas organizadoras, porque vienen divididas en pequeños compartimentos (con tapa individual o no). Los hay de muchos tamaños y colores, aunque yo siempre los busco transparentes para poder ver el interior a simple vista y el precio suele ser de 60cents.
Yo en concreto los utilizo para guardar las fornituras de plata y abalorios "especiales".
Os pongo unas fotillos:


Esta de aquí me costó 40 cent:

Además, puedes poner una pequeña pegatina en la parte inferior para saber los precios de cada cosa.
También puedes encontrar cajitas divididas en tiendas especializadas en plástico, aunque salen un pelín más caras (alrededor del euro):

Luego también puedes toparte con cosas extrañas. En mi última visita me compré un "hujeador", o sea, una máquina que hace "hujeros".

Ya se sabe, si emplearan traductor, el producto saldría más caro :P
Estoy por mandar el envase a Luis Piedrahita...
¡Hasta la próxima!